La Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD), ante la reciente presentación del documento “Plan El Salvador Seguro” al Gobierno por parte del Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia, EXPRESA:
- Que el problema de la violencia e inseguridad requiere de un abordaje integral, interinstitucional y con participación de todos los sectores sociales. Por lo que la iniciativa de haber conformado el Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia -con representación de diversos sectores-, de haber integrado mesas técnicas y construir una propuesta consensuada sobre el tema de seguridad, es positivo.
- Nos parece igual de positivo que el plan parte de un diagnóstico compartido, que señala que “Los históricos niveles de exclusión y vulnerabilidad social, los patrones culturales que toleran, normalizan y reproducen la violencia, la debilidad institucional que provoca impunidad, la ausencia de una visión compartida sobre cómo enfrentar esta problemática junto con la dispersión de iniciativas han estimulado el establecimiento, la complejidad y la reproducción de las expresiones criminales y violentas en nuestra sociedad.”
- Indudablemente que el reto del Plan es superar experiencias anteriores de buenos planes no concretados, que han quedado en el papel y no se han implementado. Retos importantes en esta línea son obtener el financiamiento para el plan cuyo costo es alto; y que los intereses particulares que predominan en el tema de la violencia y la inseguridad, cedan ante al interés público de alcanzar paz y tranquilidad para la población salvadoreña.
- Como FESPAD siempre promoveremos iniciativas ante situaciones de inseguridad basadas en el respeto de los derechos humanos, la integralidad de las propuestas, el diálogo y la prevención. El fortalecimiento de la institucionalidad, el respeto de la Constitución y la ley, así como la independencia y capacidad del sector judicial es también clave.
- En ese sentido, alentamos a participar y contribuir para que las medidas y acciones del Plan puedan llevarse a cabo con la contribución de los diversos sectores. También a los partidos políticos y diputados a buscar consensos para el financiamiento de este Plan. Sería recomendable que las mesas técnicas que se formaron para aportar al Plan, tuvieran un carácter permanente para dar seguimiento y retroalimentar los avances y obstáculos en su implementación.
