Fespad y organización comunitaria, en coordinación con la Unidad de Salud de Zacamil, la Alcaldía de Mejicanos y Fudem realizaron jornada de salud en comunidad 28 de enero de Mejicanos.
El día 28 de febrero, Fespad y la Junta Directiva de la comunidad 28 de enero de Mejicanos, en coordinación con la la Unidad de Salud de Zacamil, la Alcaldía de Mejicanos y el apoyo de Fudem realizaron jornada de salud.
En dicha jornada se facilitó a los habitantes de la comunidad 28 de enero el acceso a diversos servicios de salud, entre ellos: medicina general, odontología, exámenes de la vista, desparacitación en niños y adultos, charlas sobre prevención de tuberculosis y cáncer de matriz.
Entre las atenciones brindas se encuentran: 52 consultas generales, 46 atenciones odontologicas y 54 consultas visuales. Las personas atendidas recibieron medicamentos. En el caso de las atenciones visuales, 19 personas requerian el uso de lentes, los cuales fueron proporcionados al precio simbólico de $15.00de por Fudem (incluyendo aros y graduación) y con facilidades de pago.
El desarrollo de la actividad se enmarca en la necesidad de acercar los servicios de salud a comunidades donde existen personas con discapacidad, niños y niñas y personas de la tercera edad que no pueden asistir a los centros de salud. Asimismo, se pretende fortalecer los lazos entre las instituciones del Estado y las comunidades, principalmente aquellas cuyas necesidades no han sido atendidas históricamente, situación que ha contribuido a mantener ciclos de violencia social.
La jornada de salud fue gestionada por Fespad a iniciativa de la Junta Directiva de la Comunidad 28 de enero de Mejicanos. Esto enmarcado en el plan de trabajo que se ha construido colectivamente con la comunidad con el objetivo de atender las necesidades de su población en todos los aspectos.
La gestión de la jornada de salud se enmarca en las actividades del proyecto “Transformando relaciones para construir la paz”, ejecutado por Fespad y financiado por Christian Aid, mediante el cual se pretende promover el diálogo entre las comunidades afectadas por la violencia y las distintas instituciones públicas a través la atención de sus necesidades, la implementación de prácticas restaurativas y actividades que fomenten la convivencia ciudadana y promuevan una cultura de paz.