La Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) desea expresar su apoyo y solidaridad con Anders Kompass, ciudadano sueco, defensor de los derechos humanos, que apoyo decididamente desde la cooperación sueca el proceso de paz y de transición democrática ocurrida en El Salvador. Anders era Director de Operaciones de Campo de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, y ha sido suspendido por haber denunciado a la fiscalía francesa sobre abusos sexuales cometidos por tropas francesas en misión de paz en la República Centroafricana.
Conforme a la información que se conoce, efectivos militares franceses que intervenían en misiones de paz en la República Centroafricana, habrían cometido abusos sexuales contra niños y niñas que se encontraban en refugios de desplazados en 2014, lo cual es un hecho grave y preocupante dado que se trata de misiones de paz.
Sabemos que el Sr. Kompass informó a su sede de lo que estaba ocurriendo a principios del año pasado. Al ver que nada ocurría, en julio del mismo año (2014) informó directamente a las autoridades francesas. Hace unas pocas semanas, repentinamente, su jefe, el Alto Comisionado, le anunció su suspensión. La noticia fue divulgada inicialmente por The Guardian, pero ya está en Le Monde, Le Point, Yahoo News, El aís (España) y otros medios.
FESPAD desea dar su respaldo a Anders Kompass, cuya trayectoria es ampliamente conocida en el mundo de derechos humanos. Anders acompañó el proceso de paz desde los esfuerzos de contadora y apoyó desde Suecia, las operaciones de ONUSAL y fue el primer representante residente del PNUD luego de los Acuerdos de Paz en El Salvador.
Consideramos que la información que dio a conocer lo hizo en razón de garantizar la investigación de los aborrecibles hechos a las mismas autoridades francesas, lo que no ponía en riesgo a víctimas y testigos. La divulgación posterior por la prensa del informe con los nombres de testigos y víctimas, varios de ellos menores de edad, es lo que las ha puesto en mayor riesgo, cuestión que debería revisarse en aras de la protección superior del menor. De hecho, el gobierno francés ha agradecido la ayuda del señor Kompass y cuenta con el respaldo del gobierno sueco.
Debe considerarse que el sistema de naciones unidas debe reaccionar fuertemente ante este tipo de hechos ya que ponen en entredicho las misiones internacionales de paz, muchas de ellas promovidas desde las Naciones Unidas.
Este caso debe llamar la atención de Naciones Unidas, dado que no es la primera vez que se suceden abusos de derechos humanos en misiones internacionales. Por lo que es importante que se revisen los mecanismos de control en este tipo de misiones. Hacemos un llamado a las autoridades de la ONU, para que el señor Kompass no sea destituido del cargo, ya que consideramos que su conducta ética de dar a conocer el hecho a las autoridades francesas fue adecuada.
Instamos a las autoridades de Gobierno al uso de los canales diplomáticos para pronunciarse, dado el importante aporte de Anders al proceso de paz.
